Ya estoy harto de mar, de gente, de cielo;
de muerte, si Dios quiere.
Nadie podrá arrancarte de mí, sombra de sueño,
porque tengo pegada en el pecho
toda tu noche de pasión horrible.
Dentro de días estaré en la llanura
para cubrir mi corazón de polvo,
el aire de arena. Nuestra sola muerte
olvidada de olvido.
(Si pudiera encontrarte. Si pudiera bajar a Río ,
esta noche;
andar por las calles oliendo las hojas gruesas de
los árboles;
abandonarme en la tierra hasta llenarme de
piojos. Distraído.)
No quiero mi idioma, mi otra vida; no quisiera
llegar nunca. Volver si fuera posible...
Magoas.
Esta noche ¡así!, desprendido totalmente;
vuelto, devuelto, perseguido: ajeno mío
sin quererme. Caído en otra voz,
resbalado.
Mi corazón negándose al polvo,
ya detrás de tu cuerpo, del aire desterrado.
Ricardo Molinari (Buenos Aires, 1898-1996), Caballo Verde para la Poesía, nº 1, Madrid, octubre de 1935 Caballo Verde, Europeana, edición digital
Envío de Jonio González
Otra Iglesia Es Imposible - Ediciones del Dock - La Nación - Hojas del Abanico -Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes - A Media Voz - Poeticus
Foto: Portada de Voz raigal de nuestra poesía (detalle), Corregidor, Buenos Aires, 1993
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