martes, diciembre 31, 2024

Cristina Campo / Dos poemas


Un año… Retenía su estrella
el cielo del Adviento. Sobre la boca
sin fiebre ni miedo mi mano
te dibujaba, oscura, una palabra.
Y la esfera del alma y del año.
vibraba en lo alto de un chorro de oro
alta y sutil la sangre.
Temblábamos
sonriendo a las miradas-al acercarse
oscuridad de ese guardián incorruptible
que en los jardines cierra las fuentes.

 Año Nuevo '53-'54

Quadernetto


*

Quedó allá, cálida, la vida,
el aire color de mis ojos, el tiempo
en que ardían en el fondo de cada viento
manos vivas, buscándome...

Quedó la caricia que no encuentro.
sino entre dos sueños, mi infinita
sabiduría hecha pedazos. Y tú, palabra
que transmutabas la sangre en lágrimas.

Ni siquiera llevo una cara
conmigo, ya convertida en otra cara
como esfera en el vino y consumida
en los enendidos silencios...

Vuelvo sola
entre dos sueños, allá veo el olivo
rosado sobre las tinajas llenas de agua y luna
del largo invierno. Vuelvo a ti que te hielas

en mi leve túnica de fuego

Passo d'addio

Cristina Campo, seudónimo de Vittoria Guerrini (Bolonia, Italia, 1923 - Roma, 1977), La Tigre Assenza, Adelphi, Milán, 1991
Versiones de Jorge Aulicino

Más poemas de Cristina Campo en Otra Iglesia Es Imposible, Las Nueve Musas, Fronterad


Un anno…Tratteneva la sua stella
il cielo dell’Avvento. Sulla bocca
senza febbre o paura la mia mano
ti disegnava, oscura, una parola.
E la sfera dell’anima e dell’anno
vibrava in cima uno zampillo d’oro
alto e sottile il sangue.
Ne tremavamo
sorridenti agli sguardi-all’accostarsi
buio di quel guardiano incorruttibile
che nei giardini chiude le fontane.

Capodanno ’53-’54


*

È rimasta laggiù, calda, la vita,
l’aria colore dei miei occhi, il tempo
che bruciavano in fondo ad ogni vento
mani vive, cercandomi…

Rimasta è la carezza che non trovo
più se non tra due sonni, l’infinita
mia sapienza in frantumi. E tu, parola
che tramutavi il sangue in lacrime.

Nemmeno porto un viso
con me, già trapassato in altro viso
come spera nel vino e consumato
negli accesi silenzi…

Torno sola
tra due sonni laggiù, vedo l’ulivo
roseo sugli orci colmi d’acqua e luna
del lungo inverno. Torno a te che geli

nella mia lieve tunica di fuoco
---

lunes, diciembre 30, 2024

Jan de Jager / De "Casa de cambio IV", 2




amanecer:

ola de luz que va barriendo 
ese trompo que es el planeta,
precedida por barullo y griterío 
de pájaros


Al sol

es curioso que todas las vidas 
empiecen por la infancia

y qué interminable que es: 
especialmente las tardes de verano

son las cuatro y diez
y te compran un helado

te terminás el helado y son apenas 
las cuatro y veinte

a lo lejos un perro sigue ladrando, 
atado al sol


Horacio remozado

Ves cómo el cerro se puso blanco de alta nieve, 
los árboles hacen horas extra para sostenerla
y los ríos de tan súbito congelarse 
dejaron la marca de la frenada.

Aquí adentro no le hagamos caso al frío, 
échale unos buenos troncos al fuego, 
descorcha un falerno de los caros, amado 
mío, y de todo lo demás que se hagan

cargo los dioses, que en cuanto hayan 
domado los vientos que marean a las olas 
del lago, ya no se sacudirán ni los cipreses 
ni los añosos olmos. Lo que traerá el futuro,

MAÑANA, no preguntes: los equis días que 
el destino te otorgue son tiempo ganado que
podrás, deberás dedicar a la danza y los amores. 
Ahora que eres mocito y aún no peinas canas

gruñonas, en parques y plazas ve a encontrarte, 
a la hora acordada, al anochecer, con esa chica 
escondida que revela con risitas su escondrijo, 
y recuerda que no se esconde de ti, sino para ti.

Odas 1.9


*
¿De qué muerto somos 
la viva imagen?

muy más que la nieve fría
     - hiberna de glande    [Virgilio]

     - where the winter/
             olive is taken    [Pound, Canto CX] 

la cabeza lustrosa y apiñada –

           scrotumtightening sea    [Joyce]

los huevos casi adentro del propio vientre – 
machedumbre recia,
 reducida y
         orgullosa, dolorida.
(ven 
dramas 
tarde

                    porque piensan
vendrá 
más 
tarde)

te lo dije corazón, 
no te me escapes
de tu jaula de costillas:

                    he vuelto a ver a aquel 
                    de quien debo protegerte

                                           de quien debo protegerte 
                               muchísimo más que de la misma muerte

Jan de Jager (Buenos Aires, 1959)

Casa de cambio
IV,
Ediciones el Dock
Buenos Aires, 2024









---
Foto: Jan de Jager / Faebook

domingo, diciembre 29, 2024

Inger Christensen / Escaleras de agua (parte I)


I 

1
La fuente de piazza Nicosia se construyó en 1572. Jacopo della Porta fue el arquitecto de moda de aquel tiempo.
Piazza Nicosia en realidad no es una plaza. Es la via di Monte Brianzo que se extiende en dirección noroeste.
Me siento a la mesa con mantel y vasos. Recién se va a servir a las 13:00.
Un Jaguar rojo entra a la plaza. Desaparece por la via Leccosa.
El sol brilla. El agua refleja la luz. Cuando el Jaguar rojo pasaba por delante, su laca reflejaba la luz.

2
La fuente de piazza Colonna fue esculpida en mármol por Rosso dei Rosso en 1575. Él venía de Florencia.
Piazza Colonna se destaca por una columna (42 m) con relieves en espiral donde se relata el cortejo fúnebre de Marco Aurelio.
Me siento a la mesa con un capuchino tibio, un vaso y una jarra de agua.
Un Jaguar rojo se detiene ante los peatones que pasan. La luz cambia del Alt al Avanti. La gente parece irritada.
El sol brilla. La laca del Jaguar rojo refleja la luz. El agua no se ve a causa del auto.

3
La fuente de piazza Campitelli podría haber sido construida en 1589 por Jacopo della Porta. Pero no es seguro.
Piazza Campitelli se extiende a lo largo de la S. Maria, en Campitelli. Al lado se encuentra un buen restaurante.
Estoy de pie en la esquina de enfrente entre dos casas típicas que pertenecen a la comuna de Roma.
Un Jaguar rojo ruge por la plaza. Viene desde la via Campitelli y desaparece en la esquina, en la via Delfino.
El sol brilla. El agua refleja la luz. La laca del Jaguar rojo refleja la luz cuando pasa.

Inger Christensen (Vejle, Dinamarca, 1935 -Copenhague, 2009), Ein chemisches Gedicht zu Ehren der Erde. Auswahl ohne Anfang ohne Ende, Residenz Verlag, Salzburgo y Viena, 1997
Versión del danés al alemán: Hans Grössel
Versión del alemán al castellano: Silvana Franzetti

---

sábado, diciembre 28, 2024

Alberto Boco / Dos poemas


Los perros cueteros

     “Mientras buscaba la estrella vespertina en una fría ventana
     y silbaba cuando Arturo derramaba su luz,
     oí reñir a los lobos, y dije: Entonces esto es el hombre
                                                                       Allen Tate


festejos tradicionales y ellos aparecen
un despertar cuando medra la noche y las explosiones comienzan
andar solos por ahí hasta el ritual de lo que se pudre
y disimular en el ruido y el olor de la pólvora barata
efectos de la temporada…

sucios de arenas el gesto distraído
pelo encrespado como en un enojo
se van amontonando en el andar cansino hasta que lo avivan
donde se junta la presa casi nadie mira
tal vez algún chico que adivina y alguna mirada
otra porque intuye
gesto veloz de repente contra el estampido
fuego en la boca y otra vez hacia allá
lejos

qué canta en el fuego y el humo en el chasquido
como rama reseca que se quiebra cada vez
qué canta en la sangre y en la carrera de súbito despierta
y vos que los mirás como se mira el amor
esa química orgánica con ropa de ternura
mirar que no se nubla en el farolero simular de la época
quién sabe qué piensa —decís
detenido ahora en el alto de la mañana
como sombra contra el moverse del mar
ahí las nubes coloreando como si vos y yo no supiéramos
que nada de todo eso es intención mientras ellos están ahí
con esa cosa que raspa como espera debajo de la sangre
cada estallido que apure la caída
del que no mira duerme y se divierte mientras
ellos con la traza del viejo mapa y el ojo que parece apagado
pero detrás de la mirada esa sombra
que apenas campea                         sabe y espera
desde lejos y a su modo
sabe y espera
siempre
desde bien allá

                                                         Para Pugnax

Los perros “cueteros” y otros abandonos; 2011; inédito; Letralia, 22 de julio de 2022

 
Modos de ver

… sobre un techo de cualquier ciudad
un gato se funde con su sombra
sigue con la mirada el planeo del rapaz
que hace su sombra en otra parte
sin saber si hay un resto que flota
o amenaza entre la cosa y su sombra
el gato ya no está y el pajarraco
se perdió de vista en lo alto
no queda un vibrar en el aire
o alguna señal de lo que pasó
en una calle de Lisboa un gato y su sombra
se mueven por el empedrado
y un hombre con los ojos de otro
lo ve pasar y no se distrae
sigue con sus pensamientos
hay algunas nubes en una tarde de sol.

Nagari Magazine, enero de 2022

Alberto Boco (Buenos Aires, 1949)

Más poemas de Alberto Boco en Letralia, Inmediaciones, Revista Triplov, Eurasia
---
Foto: Alberto Boco, librería El Jaúl. Buenos Aires, diciembre de 2024 

viernes, diciembre 27, 2024

Jorie Graham / Una pluma para Voltaire


El pájaro es un alfabeto, vuela
por encima de nosotros, agárrame
si puedes,
una bandada,
un itinerario de viaje.
Algunos nunca tocan el suelo.

Y cada vuelo es un arco para apuntalar el cielo,
un préstamo para el cielo.
Y las palabritas que hacemos de ellos, las simples plumas, perdidas para que recobremos,
caída tras caída,
una ágil armadura...

Pluma, pluma de esta mañana, dónde crece tu jardín
volando contra el viento, diciendo mira
es seguro
no aterrizar nunca,
es mejor.
Un hombre lleno de palabras

es un jardín de malas hierbas,
y cuando las malas hierbas crecen,
un jardín de nieve,
un collar de huellas: estaba aquí, mi búho de nieve quizá.
¿Quién lo ahuyentó?
Yo, dijo el gorrión,

con mi necesidad, su flecha. Y por eso estoy aquí, sin permiso, solo,
en esta nación de curvas
que no deben tomarse
las he tomado.
Una pluma,
arrancada del cuerpo o encontrada en la nieve
puede sumergirse en tinta
para formar una o más palabras: "dominante", "el sol". Un cálamo
puede emborracharse,
habiendo llegado tan lejos, teniendo tanto por recorrer - "prado",
"en vano", "imagina
el dolor"
y cuando él se fue no quedó nadie
y ésta es la llave del reino.

Jorie Graham (Nueva York, Estados Unidos, 19509), Hybrids of Plants and Ghosts, Princeton University Press, Princeton, 1980 / The Dream of the Unified Field. Selected Poems 1974-1994, The Ecco Press, Hopewell, 1995
Versión de Jonio González



A FEATHER FOR VOLTAIRE

The bird is an alphabet, it flies  
above us, catch 
as catch can, 
a flock, 
a travel plan. 
Some never touch ground.

And each flight is an arc to buttress the sky, 
a loan to the sky. 
And the little words we make of them, the single feathers, dropped  
for us to recover, 
fall and fall, 
a nimble armor...

Feather, feather of this morning, where does your garden grow  
flying upwind, saying look 
it is safe 
never to land, 
it is better. 
A man full of words

is a garden of weeds, 
and when the weeds grow, 
a garden of snow, 
a necklace of tracks: it was here, my snow owl perhaps.  
Who scared it away? 
I, said the sparrow,

with my need, its arrow. And so here I belong, trespassing, alone, 
in this nation of turns 
not meant to be taken 
I’ve taken. 
A feather, 
pulled from the body or found on the snow
can be dipped into ink 
to make one or more words: possessive, the sun. A pen 
can get drunk, 
having come so far, having so far to go - meadow, 
in vain, imagine, 
the pain
and when he was gone then there was none 
and this is the key to the kingdom.
---
Foto: Jorie Graham, Arcata, California, 1982 Jorie Graham Web

jueves, diciembre 26, 2024

Eugenio Montale / De una navidad metropolitana


Londres

Un poco de muérdago, desde la infancia suspendido racimo
de fe y escarcha sobre tu lavamanos
y sobre el espejo ovalado que ahora sombrean
tus rizos pastoriles entre estampitas y retratos
de muchachos, calzados a las apuradas 
en el marco, un botellón vacío,
vasitos de cenizas y de cáscaras,
las luces de Mayfair, luego en una encrucijada
las almas, las botellas que no supieron abrirse,
no más guerra ni paz, el tardío aleteo
de una paloma incapaz de seguirte
por los escalones automáticos que te deslizan hacia abajo…

Eugenio Montale (Génova, Italia, 1896 - Milán, Italia, 1981), "La bufera e altro", 1956, Tutte le poesie, Mondadori, Milán, 2004
Versión de Jorge Aulicino



Di un natale metropolitano
 
Londres

Un vischio, fin dall’infanzia sospeso grappolo
di fede e di pruina sul tuo lavandino
e sullo specchio ovale ch’ora adombrano
i tuoi ricci bergère fra santini e ritratti
di ragazzi infilati un po’ alla svelta
nella cornice, una caraffa vuota,
bicchierini di cenere e di bucce,
le luci di Mayfair, poi a un crocicchio
le anime, le bottiglie che non seppero aprirsi,
non più guerra né pace, il tardo frullo
di un piccione incapace di seguirti
sui gradini automatici che ti slittano in giù…
---
Foto: Eugenio Montale en su casa, Milán, 1966 RAI

miércoles, diciembre 25, 2024

Héctor Pedro Blomberg / De "Poesía reunida"


El buque en la botella

     Diminuto navío preso en una botella, 
Con tus velas tendidas, tu puente y tu bauprés,
¿Sueñas los anchos mares y la polar estrella
Entre el ruido y el humo de este figón inglés?

     Diminuto navío, ¿qué manos marineras, 
Rugosas y pacientes, en los ocios del mar 
Con amor trabajaron tus pequeñas maderas
E izaron esas velas que el viento no ha de hinchar?

     ¿Qué viejo navegante en tus maderas grises
Esculpió esta minúscula figura de mujer, 
Y al grabar en tu popa esta palabra: “Ulysses” 
De la Odisea el genio te transmitió al nacer? 

     Diminuto navío perdido entre la bruma
Del humo de las pipas, nunca, jamás, los dos
Oiremos las canciones lejanas de la espuma,
Ni soplará en nuestra alma el gran viento de Dios.

     En las obscuras albas del bar, en los instantes
En que los viejos astros comienzan a morir,
Vi correr por tus puentes pequeños tripulantes,
Como si al alba fueras tú también a partir.

     Oí como cantaban, dentro de tu botella,
Tus vagos hombrecitos, una vieja canción
Al recoger el ancla, bajo la turbia estrella
Que alumbraba la sucia miseria del figón.

     Diminuto navío, sigue tu inmóvil sueño:
Los muelles del Oriente, del alisio el cantar,
Del Gulf Stream las baladas, el Caribe risueño,
Los extraños paisajes ahogándose en el mar...

      Dile a tus diminutos y vagos marineros
Que recojan las velas, pues nunca has de partir
Del mar por los inmensos y azules derroteros
A las claras riberas donde el sol va a morir.

     Aquí nos quedaremos, diminuto navío,
Anclados en la tierra, para siempre, los dos;
Ni en tu pequeño puente ni en el corazón mío
Volverá a soplar nunca el gran viento de Dios.


Los negros de la goleta “Río”

      Treinta marineros llevaba la “Río”
Del bravo Rosales bajo el pabellón
Y eran diecisiete valientes morenos
Los que completaban la tripulación.

      La luna de sangre los vio en La Colonia:
Seis de ellos cayeron al fuego infernal
Que sobre los buques de Brown vomitaba
Con saña el ardiente cañón imperial.

     El sol de Los Pozos, la estrella de Quilmes
En el puente vieron morir otros diez:
Humilde y heroica, su sangre corría
Sobre la cubierta, mojaba el bauprés.

      Y cuando las dianas del triunfo se oyeron
Y huyó la postrera fragata imperial,
Quedaba uno solo, de pie, moribundo,
Tocando el glorioso clarín del Juncal.

     Diez y siete Negros llevaba Rosales
A bordo del barco que nunca rindió
Sobre las arenas ni sobre las aguas;
     Diez y siete negros. Ninguno volvió.

Héctor Pedro Blomberg (Buenos Aires, 1889-1955)

Poesía reunida (1908-1939)
,
prólogo de Santiago Sylvester,
Barnacle, 
Buenos Aires, 2024-2025 








Más poemas de Héctor Pedro Blomberg en Otra Iglesia Es Imposible
---
Imagen: Caricatura de Héctor Pedro Blomberg en la revista Fray Mocho, 1924 Ibero-Amerikanisches Institut / Wikimedia Commons

martes, diciembre 24, 2024

Carlos Drummond de Andrade / El sobreviviente


Imposible componer un poema a esta altura de la
evolución de la humanidad.
Imposible escribir un poema -una línea aunque sea- de
verdadera poesía.
El último trovador murió en 1914.
Tenía un nombre del que ninguno se acuerda más.

Hay máquinas terriblemente complicadas para las
necesidades más simples.
Si quiere fumar un puro apriete un botón.
Las camperas se abotonan por electricidad.
El amor se hace sin cables.
No se precisa estómago para la digestión.

Un sabio declaró en El Diario que todavía falta
mucho para llegar a un nivel razonable de
cultura. Pero para entonces, felizmente, estaré muerto.

Los hombres no mejoran
y se matan como chinches.
Las chinches heroicas renacen.

Inhabitable, el mundo está cada vez más habitado.
Y si los ojos reaprendiesen a llorar sería un segundo
diluvio.

(Desconfío que escribí un poema).

Alguna poesía, 1930.

Carlos Drummond de Andrade (Itabira, Minas Gerais, Brasil, 1902 - Rio de Janeiro, Brasil, 1987 )
Traducción de Ricardo Ruiz

Más poemas de Carlos Drummond de Andrade, traducidos por distintos traductores, en Otra Iglesia Es Imposible


O Sobrevivente

Impossível compor um poema a essa altura da
evolução da humanidade.
Impossível escrever um poema – uma linha que seja –
de verdadeira poesia.
O último trovador morreu em 1914.
Tinha um nome de que ninguém se lembra mais.

Há máquinas terrivelmente complicadas para as
necessidades mais simples.
Se quer fumar um charuto aperte um botão.
Paletós abotoam-se por eletricidade.
Amor se faz pelo sem-fio.
Não precisa estômago para digestão.

Um sábio declarou a O Jornal que ainda falta
muito para atingirmos um nível razoável de
cultura. Mas até lá, felizmente, estarei morto.

Os homens não melhoram
e matam-se como percevejos.
Os percevejos heróicos renascem.

Inabitável, o mundo é cada vez mais habitado.
E se os olhos reaprendessem a chorar seria um
segundo dilúvio.

(Desconfio que escrevi um poema).

Alguma poesia, 1930
---

lunes, diciembre 23, 2024

Paul Blackburn / Meditación en el subterráneo


Aquí en el principio de la nueva estación
antes de que las hojas nuevas retoñen, a
cada lado de la estación East Parkway
     cerca de los jardines botánicos
queman la basura en los terraplenes, dejando
más desnudo a nuestro triste y civilizado desecho.

1 lata de café sin tapa
1 pinta vacía de White Star, la marca
     desteñida por la lluvia
1 lata vacía de cerveza
2 botellas vacías de Schenley
1 condón vacío, visto desde
1 tren casi vacío
     vacío
     vacío
     vacío

Repetida así la palabra hasta parece graciosa.

Un hombre en un a callejuela llevando su carga matutina
     ya camina
Y lo hace tan sólo porque apoya la mano contra una ancha
     línea roja 
pintada en la pared de un edificio, mientras pasan 
lata de café lata de cerveza condón botellas y fuego
     pasan
ladrillo desteñido y cemento marcado de hoyuelos hacia algún
     lado
alivia su vejiga en la tristeza de un disparo de sol en la
     mañana
con algún semblante de intimidad, de
alguna manera necesitado aquí. Frío. Tristeza
Mañana de un invierno en la primavera donde hace frío
     mientras
este hombre está borracho y el sol borracho y no hay
reglas gobernando la entrega de premios a los muertos.
                      Mis ojos
          entran en patios pobres, patios
                      Yo os amo
Patios os hago míos y Uds.
mis áridos terraplenes de basura, ahora que Uds. tienen
un poco de fuego para calentarse y se limpian
agradezcan a los hombres que aún los vigilan, aún
rastrillan las hojas extrañas
vuestros extraños abandonos.

     Pobre tierra de Brooklyn
     Pobre tierra americana
     Pobres casas enfermantes
pobres huracanes de calles, tanto
tus subterráneos como tus vidas públicas continúan
de cualquier manera, debajo
de basura que es rechazo, con ciudadanos
alineados, incómodos, irreflexivos que serán menos
infelices, más contentos y distraídos
si alivian sus vejigas
contra alguna que otra mugrienta pared.

Paul Blackburn (St. Albans, Estados Unidos, 1926 - Cortland, Estados Unidos, 1971), Nueva poesía U.S.A., Ediciones de la Flor, Buenos aires, 1970
Traducción de Marcelo Covián

Más poemas de Paul Blackburn en La Biblioteca de Marcelo Leites, Poetas Siglo XXI
---

domingo, diciembre 22, 2024

Alfredo Lemon / Fin de año


En la última noche del año viejo
lo que fue espera o deseo
se vuelve necesariamente desapego
o aceptación.
Rosas, almohadas, champagne
y un cigarro a medio armar.
En lo nimio se busca algún significado.
Hay que agitar el ayer para cerrar.
Romper equívocos para conectar con las esencias.
En la encrucijada del país
el silencio es un grito de auxilio
que ahoga nuestros propios pedidos de socorro.
¿Habrá una brújula posible?
En la contradicción se juntan los extremos.
Las equidistancias y los vértices se rozan.
Rezo por la realidad circundante.
Rezo por la salvación de la raza.
Dios escucha hasta los ecos de un mudo.
¿Algún párrafo equilibrará las cosas?
El espectáculo no acaba.
Sigue hacia adelante.
Sin duda, un privilegio
y orfandad.

[inédito]

Alfredo Lemon (Córdoba, Argentina, 1960)

---
Foto: Gentileza del autor

sábado, diciembre 21, 2024

Horace Julian Bond / El Obispo de Atlanta: Ray Charles


El Obispo seduce al mundo con su voz
El sudor estrangula los ojos mudos
Como insinuaciones surgiendo a través de la boca de riego
De la pena y del sueño, del mundo nunca visto
Moldeado en el yunque de África, atemperado en casa
Documentado en llantos y lamentos
Gritando para ser ignorado, cantando para ser escuchado
Latiendo desde el arroyo
El sábado a la noche
Solamente una ofrenda de plata
El Reverendísimo ha vuelto a la ciudad
¿No te hace bien este suceso?

Horace Julian Bond (Nashville, Estados Unidos, 1940 - Fort Walton Beach, 2015), Nueva Poesía U.S.A. De Ezra Pound a Bob Dylan, Ediciones de la Flor, Buenos Aires, 1970 
Traducción de Marcelo Covián


The Bishop of Atlanta: Ray Charles

The Bishop seduces the world with his voice
Sweat strangles mute eyes
As insinuations gush out through a hydrant of sorrow
Dream’s, a world never seen
Moulded on Africa’s anvil, tempered down home
Documented in cries and wails
Screaming to be ignored, crooning to be heard
Throbbing from the gutter
On Saturday night
Silver offering only
The Right Reverend’s back in town
Don’t it make you feel alright?

---
Foto: Julian Bond, Mississippi, 1963. Harvey Richards/Teaching for Change

viernes, diciembre 20, 2024

Hermenegildo Sábat / Dos textos poemáticos


Solo de batería

La orquesta de Count Basie era escuchada todas las noches
en un boliche de Kansas City (Missouri), ciudad precursora  de 
Las Vegas, que atraía y estimulaba diversas deformaciones del 
vicio. La motivación nocturna de Parker consistía en concurrir al 
Reno Club y admirar al magnífico saxofonista Lester Young. 
No se conformó con ese privilegio. Quiso probarse, ignorante
de tonos, semitonos y cualquier otro fundamento musical. 
Conocía de oído dos temas y creyó que soplando su saxo alto 
tenía garantido un diploma de músico. No advirtió sus
limitaciones. Tampoco preguntó. Se largó a tocar delante 
de maduros instrumentistas. El gran baterista Jo Jones no 
lo perdonó arrojando uno de sus platillos que cayó de manera
poco gentil delante de sus pies. Ese gesto y la humillación
que provocó cambiaron la vida de Parker y de buena parte de la 
historia de la música. Encerrado durante ocho meses aprendió
todos los ejercicios, todos los tonos y semitonos, incluso
aquellos que nunca se usan. Cuando regresó a la luz para
especial alegría de sus vecinos, que amenazaban echarlo,
despidió a un inocente despistado y devino un genio, que
apenas fue el mejor saxofonista.


Persuasiones

Charlie vivió corriendo, casi siempre fundido y pedía prestado
dinero que raras veces devolvía. Otro recurso repetido
fue la visita a casas de empeño donde liquidaba su saxo alto
para financiar sus adicciones. Algunos se sintieron dichosos
de haber sido estafados. Charlie Mingus fue
más pragmático. Lo amenazó: "Si no me devolvés lo que te di,
te cago a patadas."

Hermenegildo Sábat (Montevideo, 1933 - Buenos Aires, 2018), El pájaro murió de risa. Una interpretación gráfica de Charlie Parker, Universidad de Quilmes, 2007

Más poemas de Hermenegildo Sábat en Otra Iglesia Es Imposible, Al Pial de la Palabra
---

jueves, diciembre 19, 2024

Amir Or / El idioma dice


El idioma dice: antes del idioma
está el idioma. El idioma es huellas
empapadas de lo que hubo allí.
El idioma dice: escucha ahora.
Tú escuchas: aquí se oía 
un eco.
Toma el silencio e intenta callar.
Toma las palabras y trata de hablar.
Más allá del idioma, el idioma es herida
de la que fluye y fluye el mundo.
El idioma dice: hay, falta, hay, falta.
El idioma dice: yo.
El idioma dice: ven, te hablaremos,
te palparemos, ven a decir
que has dicho.

Amir Or (Tel Aviv, Israel, 1956), El idioma dice. Antología poética 1977-2019, Valparaíso Ediciones, Granada, España, 2023
Traducción de Gerardo Lewin
Envío de Jonio González

---
Foto: Amir Or / Facebook

miércoles, diciembre 18, 2024

Arturo Carrera / De "Fastos"


Cuesta creerlo.
Cuesta creer que una sensación se comporte
inhumanamente;
que una sensación sea una piedra,
crezca imperceptiblemente, como las piedras,
como las formas
en el estilo de las piedras.

Cuesta creer en el "estado" del poeta.
En sus aserciones y en las imágenes que a veces
confusamente imita;

¿dónde está la evidencia de su verdad,
la continua animación y movimiento
del deterioro o crecimiento
de su estilo?



Dornkirk: rara vez la televisión
con la cara pegada a la armadura te pide: ¿activás el robot?
A través del arco gótico (dos manos que a fuerza
de estar juntas lo hicieron) pasa un camello.
Y los Tres Reyes Kanzaki: Chabón, Minita, Traba.
Y la cometa queda,
como mancha de aceite
dorado en el cielo...

6 de enero.
la miniserie, la minifábula,
la minichica, el minicabro.

Y que yo escriba y no entienda,
que sueñe y no viva,
la a, la e, el leopardiano apelotonamiento de vocales.
Abuelo, Abuelo, papá, Papa.

Arturo Carrera (Coronel Pringles, Argentina, 1948), Fastos, Hum, 2010

---
Foto: MALBA

martes, diciembre 17, 2024

Hans Magnus Enzensberger / Tres poemas


Instituto de investigaciones

Oh, profetas de espaldas al mar,
de espaldas al presente, oh, hechiceros
que observáis plácidamente el futuro,
oh, chamanes eternamente
recostados en la borda,
¡basta hojear un libro de bolsillo
para descubrir vuestros misterios!

Leyendo huesos, estrellas, ruinas, entrañas,
para beneficio público, todo lo que ha sido
y todo lo que será, ¡oh, ciencia!,
bendita seas tú y los rayos de luz que nos ofreces,
mitad alarde y mitad estadísticas: tasas
de mortalidad, límites de suministro de fondos,
la creciente entropía...

¡Adelante! Todas esas iluminaciones
del color del azufre son mejores que nada,
nos mantienen felices en las noches sofocantes
del verano: impresos sacados de la computadora,
muestreos, excavaciones, confidencias
basadas en el método de Delfos... ¡bravo!
¡Bendito sea lo provisional!
Por el momento queda bastante agua fresca,
la piel respira aún expectante,
se crispa tu piel, mi piel, incluso la vuestra,
nigromantes leñosos, respirad aún,
pese a la cuestión de la cátedra titular,
a las notas y las pirámides de empleo,
por ahora el final (una interminable catástrofe natural,
finamente repartida) no es aún definitiva,
¡vaya consuelo!

De ahí, mis queridos cómplices, que,
en tanto se pronostican icebergs frente a Terranova
y tormentas de verano en los cielos sulfúreos
de Europa Central, es mejor que abandonéis
vuestros institutos durante el fin de semana. Corred
a salvar la vida, o un pedazo de ella, algo interino,
sea cual fuere su significado, hasta el lunes;
incluso en el caso de que esta forma de actuar
no resulte conveniente
como base de vuestras predicciones.

Oh, amigos siempre sedientos de sabiduría,
qué lástima me dais, descansando en vuestras dachas,
en vuestras cabañas irlandesas, o en la isla de Korcula,
de espaldas al mar,
apagando plácidamente vuestros cerebros.
¡Adelante, y que vuestra antorcha nunca se apague
durante el juego de ping-pong! Os bendigo.
 
 
Modelo para una teoría del conocimiento

Aquí tienes una caja,
una caja grande
con una etiqueta que dice
caja.
Ábrela,
y dentro encontrarás una caja,
con una etiqueta que dice
caja dentro de una caja cuya etiqueta dice
caja.
Mira adentro
(de esta caja,
no de la otra)
y encontrarás una caja
con una etiqueta que dice...
y así sucesivamente,
y si sigues así,
encontrarás
tras esfuerzos infinitos
una caja infinitesimal
con una etiqueta
tan diminuta,
que lo que dice
se disuelve ante tus ojos.
Es una caja
que sólo existe
en tu imaginación.
Una caja perfectamente vacía.

Los elíxires de la ciencia, Anagrama, Barcelona, 2002
Traducción de varios autores. De estos poemas, Heberto Padilla, con la colaboración de Hans Magnus Enzensberger y Michael Faber-Kaiser


Defensa de los lobos contra los corderos

¿queréis que los buitres devoren nomeolvides?
¿del chacal qué cosa pretendéis,
que se despoje de su piel, y del lobo:
debe arrancarse por sí mismo los colmillos?
¿qué os disgusta tanto
de comisarios y pontífices?
¿qué miráis boquiabiertos
en la mentirosa pantalla del televisor?
¿quién le cose al general
la franja de sangre en los pantalones?
¿quién le parte el pollo al usurero?
¿quién se cuelga orgulloso del ombligo gruñón esas cruces de lata? ¿quién
coge la propina, la moneda de plata,
el óbolo del silencio?

muchos son los robados, y pocos los ladrones.
pero ¿quién los aplaude? ¿quién
los condecora y distingue? ¿quién
está hambriento de mentiras?

contemplaos al espejo: cobardes
que os asusta la verdad fatigosa
y os repugna aprender
y encomendáis a los lobos la función de pensar.
un anillo en la nariz es vuestra joya predilecta.
para vosotros ningún engaño es lo bastante estúpido,
ningún consuelo demasiado barato,
ningún chantaje demasiado blando.
comparados a vosotros, corderos
que mutuamente enceguecéis
son fraternales las cornejas.

entre los lobos reina la hermandad:
siempre van en manadas.
alabados sean los ladrones:
vosotros invitándolos a la violación,
os echáis en las camas podridas
de la obediencia, y mentís
incluso gimoteando,
lo que deseáis es que os devoren. Vosotros
no cambiaréis el mundo.

1955
 
Poesías para los que no leen poesías, Barral Editores, Barcelona, 1971
Traducción de Heberto Padilla

Hans Magnus Enzensberger (Kaufbeuren, Alemania, 1929 - Munich,  Alemania, 2022)

Más poemas de Hans Magnus Enzensberger en Otra Iglesia Es Imposible, La Maja Desnuda, A Media Voz, Trianarts, Rialta, Poesía
---
Foto: Hans Magnus Enzensberger, en el festival de literatura de Waischenfeld, Alemania, 2017 Nicolás Armer /dpa/ Getty Images

lunes, diciembre 16, 2024

Alfredo Rescia / Este niño


Brilla la estrella en Belén
y Roma brilla en su trono,
nació el hijo de María
se oyen gritos y sollozos.

En la paja del pesebre
y en la marcha del exilio,
este niño es Jesucristo
en pañales perseguido.

Su nombre en la lista negra
no deja de figurar,
la mano que hace la lista
enrojece la ciudad.

A su frente está el destierro,
a su espalda la matanza,
la sangre del inocente
es la sangre más amarga.

A mi canto no lo cantes,
no quieras cantarlo ahora,
canto que nace de noche
tiene que esperar la aurora.

Cuidado niño. Cuidado
bajo la noche de Herodes.

[inédito]

Alfredo Rescia (Leones, Córdoba, Argentina)

---
Foto: Alfredo Rescia/ Facebook

domingo, diciembre 15, 2024

Llorenç Gomis / El homenaje


El poeta ya tiene sus años.
Para ser un hombre de edad escribe bastante bien.
Camina bastante bien.
Tartamudea un poco, pero siempre ha tartamudeado.
Cuando joven le decían el Tarta.

El poeta vive
un poco retirado
para ver si los otros van leyendo todo lo que ha escrito.
Es un poeta importante, dice el locutor.
Usted es un poeta importante, dice el locutor.
Díganos, ¿qué escribe?

El poeta es un hombre de edad
y sabe muchas
cosas, tantas sabe
que no escribe sobre ellas.
Importante, importante,
dice el locutor, este hombre es importante.
Miren cómo calla. ¿Por qué no le dan un premio?

Un premio, dicen todos, un premio para este hombre que calla.

¿Qué haremos si no le dan un premio?
Es un señor mayor y no tiene premio. ¿Qué haremos?
No sabemos adónde han ido a parar sus libros.
Es un hombre importante, dice el locutor.
Denle un premio a ver si ríe.

No, no, dice el locutor. Es demasiado importante,
más vale que no ría, que no escriba. Es importante que sea
importante, para todos, es importante.

Llorenç Gomis (Barcelona, España, 1924-2005), Déu vos guard i passi-ho bé, Edicions 62, Barcelona, 1989. Versión de Jonio González.



L'HOMENATGE

El poeta té els seus anys.
Per ser un home d'edat, escriu prou bé.
Camina prou bé.
Quequeja una mica, però sempre ha quequejat.
De jove li deien Quequé.

El poeta viu
una mica retirat
per veure si els altres van llegint tot allò que ha escrit.

És un poeta important, diu el locutor.
Vostè és un poeta important, diu el locutor.
Digui'ns, què escriu?

El poeta és un home d'edat
i en sap un niu
de coses, tantes en sap
que no les escriu.
Important, important,
diu el locutor, aquest home és important.
Mireu com calla. ¿Per què no li donen un premi?

Un premi, diu tothom, un premi per a aquest home que calla.

¿Què farem si no li donen un premi?
És un home gran i no té premi. ¿Què farem?
No sabem on han anat a parar els seus llibres
És un home important, diu el locutor.
Doneu-li un premi a veure si riu.

No, no, diu el locutor. És massa important,
més val que no rigui, que no escrigui. És important que sigui
important, per a tots, és important.
---

sábado, diciembre 14, 2024

Lia Sturua / Sobre los motivos de Platón


Tanta nieve yacía en mi carne
que sería mejor cortarla,
se requieren los espacios vacíos del mapa,
los llamarán Terra Incognita
y la descubrirán,
van a transferirte al rango de la nueva tierra;
¿de la delicadeza y de la variedad de estilos
qué Estado se puede construir
para dejar entrar a los poetas?
Con el estómago vacío
te van a montar un Pop Art literario de tal manera
que no podrás distinguir
dónde está la tiranía envuelta en periódicos
y dónde -la sintaxis sorprendida por el Elbrus-
tu casa legítima,
la pared, cuya altura
confirmas con el llanto de un niño,
el vestido rojo sin usar desde hace mucho -
la revolución planchada en el armario…
¿Pero, qué nieve yacía en tu carne,
qué es lo que pretenden los poetas
del Estado ideal?

Lia Sturua (Tiflis, 1939), 16 Poemas de "Poesía georgiana contemporánea" *, Vallejo & Co., 12 de marzo de 2024
Selección y traducción del georgiano al español de Lana Kalandia y Rodolfo Häsler

* Huerga & Fierro, Madrid, 2023


პლატონის მოტივებზე 

ისეთი თოვლი მედო ამ ხორცზე,
რომ, ჯობდა, ამოეჭრათ,
ცარიელი ადგილები აუცილებელია რუკაზე,
ტერრა ინცოგრიტა-ს დაარქმევენ
და აღმოაჩენენ,
ახალი მიწის რანგში გაგიყვანენ;
აბა, სინატიფისგან და სტილების სიმრავლისგან
რა სახელმწიფოს ააშენებ?
შიგ პოეტები რომ შეუშვა?
მშიერ კუჭზე ისეთ
ლიტერატურულ პოპ არტ-ს მოგიწყობენ,
ვერ გაარჩევ,
სად გაზეთებში შეხვეული ტარანია
სად იალბუზით გაოცებული სინტაქსი _
შენი კანონიერი სახლი,
კედელი, რომლის სიმაღლეს
ბავშვის ტირილით ამოწმებ,
დიდი ხნის ჩაუცმელი წითელი კაბა _
გაუთოებული რევოლუცია კარადაში…
ან რა თოვლი გედო იმ ხორცზე?
ან რა უნდათ პოეტებს
იდეალურ სახელმწიფოში?
---
Foto: Kvira

viernes, diciembre 13, 2024

Kay Ryan / Sin nombres / Un traje nuevo


Sin nombres 

No nos tientan
los espacios grandes:
superficies escarpadas, ásperas
laderas de glaciar, toda esa clase
de cosas cuyos nombres  
se desvanecen. Y, aunque intentes
buscar alguna relación,
no vas a conseguirlo. Algunos
grandes lagos y pendientes resbaladizas
no están hechos para nosotros.
Me da vértigo pensar en lugares
a los que el pensamiento no puede aferrarse.


Un traje nuevo 

Te suena la historia
del emperador al que engañaron
sus sastres. 

Pero los sastres
siguen arreglándoselas
para ganar dinero
hagan lo que hagan. 

(Sastre significa
conseguir que algo le venga bien
a alguien). 

Seguro
que acabarán descubriendo
tu vanidad. 

Y dejarás de hacer
lo que te gusta
cuando los sastres te susurren:
“Solo tú podrías llevar esto”. 

Casi nunca se trata de un traje
como el que compró el emperador,
 pero siempre se parece
a algo que ya tenías.

Kay Ryan (San José, California, 1945), The Best of It  Grove Press, Nueva York, 2020
"Cinco poemas de The Best of It", Revista La Pecera, Mar del Plata, Argentina
Traducción de Luis Bagué Quílez



NO NAMES 

There are high places
that don’t invite us,
sharp shapes, glacier-
scraped faces, whole
ranges whose given names
slip off. Any such relation
as we try to make
refuses to take. Some
high lakes are not for us,
some slick escarpments.
I’m giddy with thinking
where thinking can’t stick.
NEW CLOTHES

The emperor who
was tricked by the tailors 
is familiar to you. 

But the tailors
keep on changing
what they do
to make money. 

(Tailor means 
to make something 
fit somebody.)

Be guaranteed
that they will discover 
your pride. 

You will cast aside 
something you cherish
when the tailors whisper, 
“Only you could wear this.” 

It is almost never clothes
such as the emperor bought 

but it is always something close 
to something you’ve got.  
---

jueves, diciembre 12, 2024

Yorgos Seferis / De "Mitología"


X

Nuestro país está cercado, rodeado por montañas
que noche y día sólo tienen cielo bajo por techumbre.
Carecemos de ríos, carecemos de pozos, 
carecemos de manantiales.
Sólo tenemos algunas cisternas vacías
que resuenan y que veneramos.
Ruido muerto y vacante, semejante a nuestra soledad,
semejante a nuestro amor, semejante a nuestros cuerpos.
Nos parece extraño que alguna vez hayamos construido
nuestras casas, nuestras chozas y nuestros apriscos.
Y nuestras nupcias, con sus coronas frescas y sus alianzas
se nos vuelven enigma insoluble para nuestra alma.
¿Cómo pudieron haber nacido nuestros hijos?
¿Cómo pudimos haber crecido?

Nuestro país está cercado, los sombríos Simblegadios*
lo ciñen. En los puertos
los domingos, cuando bajamos allí para tomar aire,
vemos de pronto centellar, a la caída del sol,
derrelictos trizados de viajes que no han podido jamás cumplir su derrotero
y cuerpos que no saben ya cómo hacerse el amor.


* Mit. Los Simblegadios eran dos enormes peñones situados frente a frente a la entrada de un puerto, dos especies de vigías alertas o torreones de guardia que, al advertir, de un modo mágico, el paso entre ellos de un barco enemigo, se juntaban de pronto, obrando también mágica e intempestivamente, como una prensa (...) En cierto modo, los Simblegadios constituyen, según Mircea Eliade (Naissances Mystiques), los "guardianes del umbral", homologables a los monstruos y a los grifos que custodian un tesoro en el fondo del mar. Así, es tan difícil penetrar en el Jardín de las Hespérides como pasar entre estas dos rocas que se entrechocan. Y cada una de estas proezas constituye una prueba iniciática por excelencia. Por cuanto no son dificultades de orden físico las que distinguen a los Simblagadios, sino "dificultades" inherentes a toda iniciación. (N. del T.)


XIII

Hydra

Delfines, estandartes y cañonazos.
El mar, tan amargo antaño para tu alma,
levantaba a veces los navíos multicolores y resplandecientes,
en encrespada onda, bajo un todo azul con alas blancas;
el mar, tan amargo antaño para tu alma
y tan colmado ahora de colores bajo el sol.

Cándidas velas, luz y los húmedos remos
batiendo el sereno oleaje como un parche.

¡Qué bellos serían tus ojos si volviesen a mirar;
tus manos luminosas, si pudieran tenderse;
tus labios, como otrora, vivos,
sabrían a milagro,
Tú lo buscabas.
          ¿Y qué buscabas frente a la ceniza
o en la lluvia o el viento o la bruma,
a la hora en que las luces se extinguían,
y la ciudad se derrumbaba, cuando sobre los pavimentos
el Nazareno te mostraba su corazón?
¿Qué buscabas? ¿Por qué no vienes?
¿Qué buscabas?


XVIII

Lamento haber dejado pasar un vasto río entre mis dedos
sin beber una gota de él.
Ahora me hundo en la piedra.
Un tierno pino sobre la tierra roja
es mi único compañero.
Todo cuanto he amado desapareció
con las casas que eran nuevas el verano anterior y se desmoronaron
bajo el viento del otoño.


XXI

Nosotros, los que hemos partido en aquella peregrinación,
contemplamos las estatuas derruidas.
Y olvidándonos de nosotros mismos, nos hemos dicho
que la vida no se pierde tan facilmente,
que la muerte tiene caminos inexplorados
y también su justicia;
que cuando morimos, erguidos,
confundidos en la fraternidad con la piedra,
unidos con la dureza y la debilidad,
los muertos antiguos ya han franqueado el círculo,
han reencontrado la existencia
y sonríen en una calma extraña.

Jorge (Yorgos) Seferis (Esmirna, Turquía, 1900 - Atenas, 1971), "Mitología" [1935] *, 'El zorzal´y otros poemas, Editorial Losada, Buenos Aires, 1966
Selección, traducción y prólogo de Lysandro Z.D. Galtier, "revisados y aprobados por el autor"

*  El traductor aclara que el título original de este libro, Mitisthórimas, se emplea comúnmente en el sentido de "novela". Seferis dice: "Ha sido elegido en razón de sus dos componentes: Mito, por cuanto en cierta manera me he inspirado en una mitología precisa, e Historia, por cuanto traté de expresar, de una manera correlativa, una situación tan independiente de mí como lo son los personajes de una novela".

---

miércoles, diciembre 11, 2024

Luis César Amadori / Rencor


[Tango]

Rencor, mi viejo rencor,
dejame olvidar
la cobarde traición.
¡No ves que no puedo más,
que ya me he secao
de tanto llorar!
Dejá que viva otra vez
y olvide el dolor
que ayer me cacheteó...
Rencor, yo quiero volver
a ser lo que fui...
Yo quiero vivir...

Este odio maldito
que llevo en las venas
me amarga la vida
como una condena.
El mal que me han hecho
es herida abierta
que me inunda el pecho
de rabia y de hiel.
La odian mis ojos
porque la miraron.
Mis labios la odian
porque la besaron.
La odio con toda
la fuerza de mi alma
y es tan fuerte mi odio
como fue mi amor.

Rencor, mi viejo rencor,
no quiero sufrir
esta pena sin fin...
Si ya me has muerto una vez
¿por qué llevaré
la muerte en mi ser?
Ya sé que no tiene perdón...
Ya sé que fue vil
y fue cruel su traición...
Por eso, viejo rencor,
dejáme vivir
por lo que sufrí.

Dios quiera que un día
la encuentre en la vida
llorando vencida
su triste pasado
pa' escupirle encima
todo este desprecio
que babea mi vida
de amargo rencor.
La odio por el daño
de mi amor deshecho
y por una duda
que me escarba el pecho.
No repitas nunca
lo que vi' a decirte:
rencor, tengo miedo
de que seas amor.

[1932]

Luis César Amadori (Pescara, Italia, 1902 - Buenos Aires, 1977)

Más letras e información sobre Luis César Amadori en Puro Tango
---
Foto: IMDb

martes, diciembre 10, 2024

Tamara Kamenszain / Tres poemas




Envuelta en ropa sucia que te dejo
me dejo ir subida a tres saludos
familia mía ustedes me retornen
amiguen ese andén hasta la casa
qué rieles toquen vidas paralelas
qué vidas cruz en señas de los trenes.
Somos cuatro. Dos (por cuatro)
en la rosa de los vientos
a la luz cardinal de nuestras noches
brillamos más, fugaces
multiplicados todos por la espera.
Quien se va prendiendo del que queda
una moral, un guiño de linterna a
campo abierto arrastra su valija.
La cargo sola. Pido mi descarga:
desde atrás, escudo de la muerte,
brazos cruzados de mi abuela
en candelabro.

Vida de living, 1991


Otra vez en el bar de las mujeres
me tomo la copa del olvido.
"El tango es macho"
cantan mis amigas
pero según el tango
ellas son musas tristes
o se ven
como muñecas marchitas
de vodevil.
Y a juzgar por mí
(gran olvidada de mí)
no sé si nosotras ahora
formamos una orquesta 
             de señoritas
o sin son ellos muchachos de antes
los que ahora tocan de oído
nuestro repertorio
mientras nosotras
antes también pero de apurar la copa
ya entonábamos mal.

Tango Bar, 1998


Antepasados

¿Adónde van?
Me voy con ellos desciendo de mis hijos
hasta donde quieran llegar astros rodantes
si a la hora del nacimiento calcularon ascendiente
no lo abandonen más.
Desde el Mar Negro hasta el Estrecho
se naturalizan conmigo de mí vienen
chicos de apellido descompuesto
viajando para ser argentinos
inmigrantes por vomitar en cubierta
dados vuelta nos vuelven a nosotros
como vinilo rayado de beatles
de Rusia para acá
y de aquí a la URSS que fue
dueños de un desierto que avanza
bisabuelos de la nada.

El ghetto, 2003

Tamara Kamenszain (Buenos Aires, 1947-2021), La novela de la poesía. Poesía reunida, Adriana Hidalgo, Buenos Aires, 2012

---