de "Bulgaria"
XIII
No hay paisajes lógicos en Bulgaria,
no hay lógica en ningún lugar
sino un absoluto parecido.
Sentir, aunque crea
pensar:
Nadie conoce a nadie - hasta que amanece
no hay imágenes en la ventana, y Bulgaria
puede ser
un hermoso camastro - y nuestros hijos
hijos de la piedra,
porque no hay
más que piedras
en Bulgaria.
recuerdo de heladas y cardos azules
con flores
que nadie ama.
XV
Lo más extraño, y quizá lo mejor
de Bulgaria
sea la nobleza de su concepción:
un espacio en el cual no se puede permanecer.
Marina Serrano (Quequén, Argentina, 1973), Segunda fundación, Cabiria, Buenos Aires, 2015
Foto: Marina Serrano en FB
XIII
No hay paisajes lógicos en Bulgaria,
no hay lógica en ningún lugar
sino un absoluto parecido.
Sentir, aunque crea
pensar:
Nadie conoce a nadie - hasta que amanece
no hay imágenes en la ventana, y Bulgaria
puede ser
un hermoso camastro - y nuestros hijos
hijos de la piedra,
porque no hay
más que piedras
en Bulgaria.
recuerdo de heladas y cardos azules
con flores
que nadie ama.
XV
Lo más extraño, y quizá lo mejor
de Bulgaria
sea la nobleza de su concepción:
un espacio en el cual no se puede permanecer.
Marina Serrano (Quequén, Argentina, 1973), Segunda fundación, Cabiria, Buenos Aires, 2015
Foto: Marina Serrano en FB
No hay comentarios.:
Publicar un comentario