Packard
Era una mina bien, era un gran coche,
era un packard placero, era una alhaja:
auto que siempre trabajó de noche
llevando siempre la bandera baja.
Pero un día la droga la hizo suya
y, en vez de cargar nafta, echó morfina
y cerrando el escape por la buya
se fajaba debute en cada esquina.
Ayer la vi pasar... Iba dopada
y me sentí, yo curda, un santo Asís
al ver que de su pinta abacanada
pinta que fuera de auto de parada,
sólo queda, cual resto de chocada,
con los cuatro fierritos del chasís.
El feite
Recuerdo de un amuro ranfañoso,
luce tajo de guapo, marca rea,
un feite refasí, meticuloso,
que un cacho de nariz le escolasea.
Beso maula de daga matadora,
no ha de borrarse nunca, hasta la muerte,
por más que el que lo lleve sea ahora
tayador ventajero con la suerte.
Por eso es que le digo cuando pasa
-engrupido debute, farolero,
de mucho cueyo y de corbata escasa-:
-Ya que aura sos bacán y el vento empacas,
y la rolás con púas, ¡pesebrero!,
no te sacas el feite, no te sacas.
Carlos Muñoz del Solar, Carlos de la Púa (La Plata, 1898-Buenos Aires, 1950), La crencha engrasada [1928], cuaderno sin mención de editor ni pie de de imprenta
Ilustración: De la Púa, por Hemenegildo Sábat, archivo del diario Clarín, Buenos Aires
Era una mina bien, era un gran coche,
era un packard placero, era una alhaja:
auto que siempre trabajó de noche
llevando siempre la bandera baja.
Pero un día la droga la hizo suya
y, en vez de cargar nafta, echó morfina
y cerrando el escape por la buya
se fajaba debute en cada esquina.
Ayer la vi pasar... Iba dopada
y me sentí, yo curda, un santo Asís
al ver que de su pinta abacanada
pinta que fuera de auto de parada,
sólo queda, cual resto de chocada,
con los cuatro fierritos del chasís.
El feite
Recuerdo de un amuro ranfañoso,
luce tajo de guapo, marca rea,
un feite refasí, meticuloso,
que un cacho de nariz le escolasea.
Beso maula de daga matadora,
no ha de borrarse nunca, hasta la muerte,
por más que el que lo lleve sea ahora
tayador ventajero con la suerte.
Por eso es que le digo cuando pasa
-engrupido debute, farolero,
de mucho cueyo y de corbata escasa-:
-Ya que aura sos bacán y el vento empacas,
y la rolás con púas, ¡pesebrero!,
no te sacas el feite, no te sacas.
Carlos Muñoz del Solar, Carlos de la Púa (La Plata, 1898-Buenos Aires, 1950), La crencha engrasada [1928], cuaderno sin mención de editor ni pie de de imprenta
Ilustración: De la Púa, por Hemenegildo Sábat, archivo del diario Clarín, Buenos Aires
Capo total...también José Pagano y Felipe Fernández (Yacaré) aunque no recordados.
ResponderBorrarGrandes todos estos poetas. Hermoso lo de Tuñón, Pavese. Es cierto, hay que ir rescatando poetas y poemas olvidados. Este es el aporte de otra iglesia, excelente por cierto, y el granito de arena que podamos ir agregando nosotros. Abrazo.
ResponderBorrar