jueves, diciembre 09, 2010

Julio Llinás / El gran mal


El gran mal 

La cacería comenzó cuando 
unas hienas de paso descubrieron la química 
perfecta. 
(Esto fue impresionante.) 
En la alta noche desfilaron 
los Sensibles -los comerciantes y otros notables poderosos-. 
Y un voluntario fue arrojado a los ácidos sudores. 
Yo he presenciado esta epidemia, 
como un testigo muy viejo, muy santo y muy enfermo. 

de La ciencia natural

Julio Llinás (Buenos Aires, 1929-2018), Poesía argentina, selección del Instituto Torcuato Di Tella, 1963, Universidad de Quilmes, 2010 

 Ilustración: La cacería nocturna, c.1460, Paolo Uccello

No hay comentarios.:

Publicar un comentario