Bañado
Nunca pude sentirme solo frente al río
Brilla una luz perpetua entre sus aguas
Si me acompaña es porque no ostenta cicatrices
ya que su piel convence de perfecta
por siempre intuyo que al fondo
muy al fondo
oculta un laberinto de heridas
que no cierran
Ahora vuelvo después de tanto tiempo
Quién no regresaría sabiendo que lo espera
una arquitectura azul amante de las lanchas
Esta procesión de fuego
estremeciendo ocasos
con la tenura de su espuma blanca
Quien no volvería sabiendo que la lluvia
por el propio deseo de acariciar sus aguas
al fin se ahoga
en nuestro
Río Negro
a mi madre
Nunca
Jamás
las hojas del otoño
ensucian el camino
Al contrario
lo enjoyan
ya cansado de barro
Todo
estará muerto
alguna vez
Menos
esta imagen
que
te
toca
Fernando Noy (San Antonio Oeste, 1951), Piedra en flor, Ediciones del Paraíso, Buenos Aires, 2011
Ilustración: Paesaggio urbano, 1945, Mario Sironi
"Quien no volvería sabiendo que la lluvia
ResponderBorrarpor el propio deseo de acariciar sus aguas
al fin se ahoga
en nuestro
Río Negro"
Abrazo inmenso al poeta Fernando Noy! Llegaremos al mar!
Hermosas poesías!
ResponderBorrarTe estoy viendo en LN+. No te conocía. Te busqué para leer tus poesías. Seguiré buscando Fernando. Me encanta escucharte. Oigo al viento perdido en el tiempo! Es muy interesante tu vida. Abrazo!
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