Canción de la noche
Hálito de lo inmóvil. Un rostro de animal
pasmado ante la santidad del azul.
Poderoso es el silencio en la piedra.
La máscara de un pájaro nocturno. Tres dulces
sones suenan a una. ¡Elai! tu rostro
se inclina mudo sobre el agua azulada.
Oh callados espejos de la verdad.
En la sien de marfil del solitario
aparece el reflejo de ángeles caídos.
Al anochecer mi corazón
Al anochecer se oye el grito de los murciélagos.
Dos caballos negros saltan por el prado.
Susurra el arce rojo.
Ante el caminante aparece la pequeña taberna del camino.
Magnífico gustar el vino nuevo y nueces.
Magnífico: tambalearse borracho en el bosque crepuscular.
A través del ramaje negro suenan campanas lastimeras.
Sobre la cara gotea rocío.
Georg Trakl (Salzburgo, 1887 - Cracovia, 1914), Poesías, Carmina, Buenos Aires, 1970
Hálito de lo inmóvil. Un rostro de animal
pasmado ante la santidad del azul.
Poderoso es el silencio en la piedra.
La máscara de un pájaro nocturno. Tres dulces
sones suenan a una. ¡Elai! tu rostro
se inclina mudo sobre el agua azulada.
Oh callados espejos de la verdad.
En la sien de marfil del solitario
aparece el reflejo de ángeles caídos.
Al anochecer mi corazón
Al anochecer se oye el grito de los murciélagos.
Dos caballos negros saltan por el prado.
Susurra el arce rojo.
Ante el caminante aparece la pequeña taberna del camino.
Magnífico gustar el vino nuevo y nueces.
Magnífico: tambalearse borracho en el bosque crepuscular.
A través del ramaje negro suenan campanas lastimeras.
Sobre la cara gotea rocío.
Georg Trakl (Salzburgo, 1887 - Cracovia, 1914), Poesías, Carmina, Buenos Aires, 1970
Traducción de Wolfgang von Harder, Narciso Pousa, Rogelio Bazán, Sofía Maffei
---
Foto: Wkimedia Commons
«sueño y muerte, las águilas aciagas
ResponderBorrargraznan toda la noche sobre esta cabeza», de 'queja'.