sábado, julio 27, 2013

Poemas elegidos, 84


Martín Armada
(Buenos Aires, 1979)

El guardián del hielo, de José Watanabe
No conozco en detalle la obra de José Watanabe. Es más, no podría decir que esta elección es la de un lector atento de José Watanabe. Esto me sirve para aceptar que el golpe de un poema puede ser absoluto. Es decir, que un poema se termina cuando se construye un misterio. "El guardián del hielo", enseña eso, tiene esa textura: te da todo lo que te quita. Y por eso es un poema enorme, atroz, como un arca. Es en esencia como lo que ocurre con "El maestro de kung-fu", otro hermoso poema de Watanabe, donde se narra otra historia. Un testigo ve al maestro luchar cada día con su enemigo que no es el aire, sino algo invisible y milenario.  Y afirma: "Ninguno vence nunca, ni él ni él, y mañana volverán a enfrentarse". Así quizás sea, en parte, la dinámica entre nosotros y el Tiempo. Parece una preocupación bien noble para un poema.




El guardián del hielo 

Y coincidimos en el terral
el heladero con su carretilla averiada
y yo
que corría tras los pájaros huidos del fuego
de la zafra.
También coincidió el sol.
En esa situación cómo negarse a un favor llano:
el heladero me pidió cuidar su efímero hielo.

Oh cuidar lo fugaz bajo el sol…

El hielo empezó a derretirse
bajo mi sombra, tan desesperada
como inútil.
Diluyéndose
dibujaba seres esbeltos y primordiales
que sólo un instante tenían firmeza
de cristal de cuarzo
y enseguida eran formas puras
como de montaña o planeta
que se devasta.

No se puede amar lo que tan rápido fuga.
Ama rápido, me dijo el sol.
Y así aprendí, en su ardiente y perverso reino,
a cumplir con la vida:
yo soy el guardián del hielo.

José Watanabe (Laredo, 1945-Lima, 2007)



Foto: Martín Armada por Clara Muschietti

1 comentario:

  1. Alicia Silva Rey27 julio, 2013 11:21

    "... el golpe de un poema puede ser absoluto. Es decir, que un poema se termina cuando se construye un misterio", Martín Armada dijo y definió una poética que comparto, aunque me es in-alcanzable.
    TODO Bello.

    ResponderBorrar