De la metáfora sustentarnos
El mundo,
carro cuyas lanzas toman
una dirección, ruedas
imprimiendo
huellas en el sentido inverso,
como quiera se visualice,
tangible y no,
metáfora
de que duplicidad y equívoco
cercan, rotamos sin rotar,
y aplicados a que cada
metáfora propende a otra,
inopinados tropos concitando
a que la idea germen se propague,
adquiera diafanidad, inmediatez,
cual si además
de la imagen del carro, carruaje,
inténtaramos esta:
el mundo, gran vestíbulo
que da a vacíos, en desniveles
falibles al recorrerlo,
nunca la salida,
o ensayáramos con una
todavía más realista,
el mundo, común
cuyas casas son todas tiendas, una piel
de cordero colgando en su entrada,
y agazapados en la nuestra,
ambigüedad y fraude,
pues lo que guardamos para ofrecer, vender,
es carne de perro.
Alberto Girri (Buenos Aires, 1919-1991), "Tributo a W.S.", 1989-1990, Editorial Fraterna, Buenos Aires, 1990.
el poema como idea de la poesía
ResponderBorrarQue la finalidad
sea provocar el sentimiento
de las palabras,
y alcanzar
el desafío de la expresión,
perseguir objetos
que se ajustan al sentimiento,
hundirse en objetos
hasta la emoción adecuada,
está probado;
y tanto, probado y probado,
como no lo está
el que en esos tránsitos
la tendencia madre sea
por dónde va la inspiración,
«si en frío o en caliente»,
y no lo está
que haya que seguir a Homero
entre las musas, su rogar que lo asistan,
y a Platón
saludando hermosos versos,
más en los mediocres pero iluminados
que en los sagaces y hábiles exclusivamente
al amparo de sus propias fuerzas,
y a Dante, al reclamar
la intervención de los dioses
acaso sin creer en ellos:
O buono Apollo, all'ultimo lavoro
fammi del tuo valor...
Pero tampoco ninguna
terminante prueba hacia lo opuesto,
que el poema
se conduzca en la mente como un
experimento en una ciencia natural,
y que la aptitud
combinatoria de la mente sea
la sola inspiración reconocible.
de: La poesía, Bonaverde- Girri, Ediciones del Retiro, Buenos Aires, 1983, Ejemplar n° 10.
... hace rato que compramos "carne de perro"; buena, desde el ayer de las cosas, esta denuncia poema de Girri, el lobo solitario.
ResponderBorrarUrrus.