Mi Musa muda
Mi Musa muda por decoro se mantiene callada
mientras el comentario de tus alabanzas guarda,
archivado ricamente, en los trazos de oro de su estilo
y en las preciosas frases dilectas de las musas.
Yo pienso buenos pensamientos, otros escriben buenas
palabras; como un sacristán ignorante siempre exclamo
"amén", a cada himno que aquel espíritu hábil
me ofrece en pulidas formas de pluma refinada.
Al oír que te alaban yo me digo: "así es, es verdad"
y a la mayor alabanza le añado un poco más,
pero eso es solo pensamiento, cuyo amor por ti,
aunque tarden las palabras, las precede siempre.
Respeta a los otros por el aliento de sus palabras,
a mí, por pensamientos mudos que hablan en las obras.
William Shakespeare (Stratford-upon-Avon, 1564-1616), Treinta sonetos, traducciones y versiones de Javier Adúriz y Agustín Adúriz Bravo, Ediciones del Dock, Buenos Aires, 2000
Sonnet 85 My tongue-tied muse in manners holds her still
My tongue-tied Muse in manners holds her still,
While comments of your praise, richly compiled,
Reserve their character with golden quill
And precious phrase by all the Muses fil'd.
I think good thoughts whilst other write good words,
And like unletter'd clerk still cry 'Amen'
To every hymn that able spirit affords
In polish'd form of well-refined pen.
Hearing you praised, I say ''Tis so, 'tis true,'
And to the most of praise add something more;
But that is in my thought, whose love to you,
Though words come hindmost, holds his rank before.
Then others for the breath of words respect,
Me for my dumb thoughts, speaking in effect.
Ilustración: Shakespeare, por Thomas Woolnoth (1809), basado en Gerard Soest (1600?-1681) National Portrait Gallery, Londres
"Respeta a los otros por el aliento de sus palabras,
ResponderBorrara mí, por pensamientos mudos que hablan en las obras." En síntesis, mírame y no me toques: ¡son todos iguales, che! Ahora en serio, extraño la rima terriblemente.