The night has a thousand eyes
No hay negación posible entre las olas
que doblan sus páginas oscuras.
Detrás del horizonte sigue el mar,
después, constelaciones y corales,
estrellas sumergidas
como las espumas frías,
y más acá la luna
rielando entre los barcos sin lógica ni orden.
Montañas o palmeras. Da lo mismo.
Todo es cuestión de plantar un escenario en que transcurra
un yo cualquiera perdido en pensamientos
sin lógica ni orden.
Caravan
Era una casa perdida en el verano
y era la tapa de un long play
y un mes de enero blanco de caballos enjaezados,
el águila en un palo hace diez años
o lo que Kaspar Hauser vio en el sueño.
Era también mi biblioteca,
fotografías, gitanos y trombones
o el hielo flotando en la TV
prendida en el desierto de este barrio.
Todo nos condena a la cultura,
las bolsas de arpillera que cargamos,
los recuerdos.
Jorge Fondebrider (Buenos Aires, 1956)
"Standards", 1993,
La extraña trayectoria de la luz.
Poemas reunidos: 1983-2013,
Bajo la Luna, Buenos Aires, 2016
No hay negación posible entre las olas
que doblan sus páginas oscuras.
Detrás del horizonte sigue el mar,
después, constelaciones y corales,
estrellas sumergidas
como las espumas frías,
y más acá la luna
rielando entre los barcos sin lógica ni orden.
Montañas o palmeras. Da lo mismo.
Todo es cuestión de plantar un escenario en que transcurra
un yo cualquiera perdido en pensamientos
sin lógica ni orden.
Caravan
Era una casa perdida en el verano
y era la tapa de un long play
y un mes de enero blanco de caballos enjaezados,
el águila en un palo hace diez años
o lo que Kaspar Hauser vio en el sueño.
Era también mi biblioteca,
fotografías, gitanos y trombones
o el hielo flotando en la TV
prendida en el desierto de este barrio.
Todo nos condena a la cultura,
las bolsas de arpillera que cargamos,
los recuerdos.
Jorge Fondebrider (Buenos Aires, 1956)
"Standards", 1993,
La extraña trayectoria de la luz.
Poemas reunidos: 1983-2013,
Bajo la Luna, Buenos Aires, 2016
No hay comentarios.:
Publicar un comentario