jueves, enero 13, 2022

María Mascheroni / De "Blues de las almas inquietas"




manos a la obra 
es esta noche   hay cosas que enmendar
camina a oscuras tanteando
haber cumplido ocho años ayuda   hará el altar
un paso el candelabro las cerillas
la imagen del santito cubierto en celofán brilla en la niebla del cuarto 
otro paso   el corazón como tambor de la tierra profunda
veloz   dicen que se lo puede llamar quedo por su nombre largo
que suena como un canto y envuelve todo el sur
dicen que ha curado mujer
un paso
la niña teme a su pie firme 
      Namuncurá Namuncurá
el otro pie avanza
pedirá
pedirá que su madre despierte y la mire cuando se zambulle 
en el peligro del dique

es ésta la noche
con sus tesoros bajo el brazo despertará a su hermana mayor
decidieron subir de la mano la noche hacia el lugar sagrado
al Pan de Azúcar
otro paso 
Namuncurá y golpea
      Namuncurá 
Namuncurá y se apoya
hay cosas que enmendar
-antes de que la noche sea tan larga y las horas de sueño predominen
y yo no pare más de beberme el peligro del río, la tentación de la 
roca más alta, mientras espero que ella se sacuda la tristeza y venga
antes que 

es esta noche
Namuncurá
alarga con cuidado su brazo roza con los dedos el hombro desnudo
susurra al oído el nombre de su hermana y despierta un grito en 
medio de la estridencia de la noche iluminada sólo por la imagen 
estridente de la noche silenciosa
Namuncurá   Ceferino   implora
tapa la boca de la hermana   susurra: Ceferino! el altar!
 
los ojos inmensos recuerdan y cierran el grito justo antes de que 
los pasos cansados de la madre alcen la voz y ¿qué pasa?
¿qué ha pasado?
la pequeña como un rayo ha simulado el sueño
la sonrisa despunta y se oculta rauda en el río
de su corazón

ahora late como un altar resplandeciente

María Mascheroni (Buenos Aires, 1958)

Blues de las almas inquietas
,
Hilos Editora,
Buenos Aires, 2021











No hay comentarios.:

Publicar un comentario