domingo, junio 01, 2008

Las afinidades, los procedimientos

El blog "Las afinidades electivas. Las elecciones afectivas" acaba de reproducir la nota "Poesía argentina en la red", de Ana Porrúa, publicada en el último numero de la extinta revista Punto de Vista (disponible en la versión digital de esa publicación). Porrúa dedica gran parte de su análisis justamente a "Las afinidades..." y al blog "La infancia del procedimiento". "Las afinidades..." acoge el texto de Porrúa en un significativo juego de espejo. Vamos directo: a Porrúa no parece gustarle ese blog. Tampoco el otro. De ambos dice: "Exponer el presente: el presente no es en este caso sólo lo que se está produciendo, los novísimos, aunque la mayor parte de los publicados en 'Afinidades' y en 'La infancia' sean poetas muy jóvenes. El presente es, más bien, la apuesta a la simultaneidad que permite internet cuando simultaneidad se transforma en desjerarquización y en mezcla." 
Inferencia En lógica tradicional, la deducción a partir de una sola premisa se llama inferencia y se considera una excepción al procedimiento: "Nieva, ergo hace frío"; o bien: "El diablo existe; ergo, Dios también". Pero no hay inferencia pura, todas entrañan otras premisas: "El congelamiento del agua se debe a las bajas temperatura; la nieve es producto del congelamiento de agua suspendida en la atmósfera; por eso, si nieva, hace frío"; o: "El diablo existe; lo reconocemos como lo opuesto a Dios; por lo tanto Dios existe". En el siguiente párrafo de Porrúa hay una inferencia con premisas ocultas, y un dato que no tuvo en cuenta y hubiese desbaratado el razonamiento (aunque las premisas ocultas permancerán como tales, seguramente): "En los poetas del núcleo inicial de Diario de Poesía que participan del blog se dan movimientos disímiles; Freidemberg elige mencionar sólo al pampeano Juan Carlos Bustriazo Ortiz, un poeta que no mucha gente conoce y que se ha transformado en los últimos años en escritor de culto; así Freidemberg es el que da a conocer lo que debería conocerse; Jorge Aulicino y Fondebrider, extrañamente, no arman una tradición con un pie fuerte en el pasado. El primero menciona a Padeletti y el segundo a Javier Adúriz y las listas se completan con poetas pares y otros que comenzaron a publicar con posterioridad pero que podrían leerse como puntos de inflexión o nuevos desarrollos de una poética propia, Casas, Villa y Durand en el caso de Aulicino; Laura Wittner o Raimondi, en el de Fondebrider (de los compañeros de Diario de Poesía, uno menciona a Martín Prieto y el otro a Daniel García Helder, como si se repartiesen las variantes de un mismo movimiento). En uno y otro caso, se arma el propio campo poético, una zona más o menos homogénea como si algo hubiera comenzado en los 80 en la poesía argentina casi desde la nada." El dato que Porrúa no ha tenido en cuenta -la elisión le permite así sugerir la conclusión: "como si algo hubiera comenzado en los 80 en la poesía argentina casi desde la nada"- es que el blog "Las afinidades..." pide a cada participante poemas, una descripción de su poética y la mención de algunos poetas, a los que a su vez se les pedirá lo mismo, y a los que éstos nombren se los convocará con idéntico requerimiento, y así. El mecanismo, si mal no entiendo, tiene el propósito de ver cómo se traman en el presente, y simultáneamente, las poéticas, de acuerdo con un procedimiento inventado en el campo de la sociología. De modo que yo no hubiese podido mencionar a Joaquín Giannuzzi, por ejemplo, ni a Alberto Girri, a Raúl González Tuñón o a Juan L. Ortiz, porque todos ellos están muertos. A mi juicio, la poesía de los 80 no nació desde la nada, y sólo pude, dentro de las reglas de juego en "Las afinidades...", nombrar a un solo poeta "afín" de los que comenzaron a publicar mucho antes, Hugo Padeletti. Los 80 no nacieron desde la nada, ni el grupo ni la poesía del grupo de los editores de Diario de Poesía en esos años. Para verificar esto, basta con ojear la colección de ese periódico; en particular, los números publicados en los 80. Y ver lo que en distintos sitios, publicaciones en papel y virtuales, Freidemberg, Fondebrider y yo escribimos acerca de autores anteriores a los 80, acerca de la tradición, acerca de poéticas, etc. La lectura que hizo Porrúa del blog "Las afinidades..." es, en general, incorrecta, y por eso ha juzgado erróneamente las elecciones de los antedichos. 
Inducción En lógica, la inducción sigue el camino opuesto a la deducción: va de lo particular a lo general; permite hilar una serie de premisas particulares para elaborar una conclusión que las abarque. El estudio moderno de la lógica indica que en los casos de inducción las proposiciones finales deben tomarse como sólo probables. Porrúa induce que la ausencia de algunos nombres de los blogs analizados es una "estrategia": "También puede abordarse 'Afinidades' por las ausencias, que además se repiten en 'La infancia'. Más allá de razones de índole personal, se puede leer un gesto en ciertos casilleros vacíos: Daniel García Helder, Sergio Raimondi, Alejandro Rubio, Daniel Durand, Martín Gambarotta. Pienso esto en relación a otros movimientos que presentan a través de estos nombres, o más bien de sus producciones, un núcleo fuerte y a la vez compacto de la poesía argentina de los últimos años." Porrúa admite que se trata de una hipótesis (que por lo demás, justamente, sólo puede emitirse "más allá de las razones de índole personal"). Pero la autora insiste: "Es plausible pensar, entonces, que decidan no participar tanto en una muestra que admite la desjerarquización y la mezcla como principios, como en la que incluye poéticas o más bien autores que están en las antípodas de su ideología poética." No me ocupé de investigar por qué los autores mencionados no están en esas muestras. Debió hacerlo Porrúa. En lo que a mí respecta, me gustaría esclarecerme acerca de qué jerarquía debería establecerse en cualquier sitio de poesía, en cualquier revista en papel, en cualquier experimento como el de "Las afinidades..." Y, por otra parte, qué disvalor implica la "mezcla".

11 comentarios:

  1. Hola Jorge, tengo la sensación de que Ana, en ese texto, defendió la "desjerarquización y la mezcla" que se produjo en ambos blogs. Desde lugares diferentes, los dos blogs, produjeron algo novedoso, abrieron otras puertas de entrada para la lectura de poesía. Tanto para escritores como para lectores. Creo que el fuerte de los dos blogs es la difusión de lo que se está escribiendo en el presente y que para quienes gustan de la crítica o de los análisis teóricos, en ambos espacios, se pueden encontrar, tal vez, otros puntos de conexión entre poéticas, en principio, disímiles. Otras lecturas. Además, por supuesto, hicieron posible la difusión de autores no muy conocidos y permitieron que los poetas conociéramos a autores provenientes de otras escuelas o estéticas. Con el riesgo, incluso mayor en el caso de las Afinidades, por ser un espacio tan abierto, de difundir material de mala calidad.
    En lo personal, como autora del blog de la Infancia, creo que el impulso vital que me permitió la construcción de ese espacio, fue una enorme curiosidad. Y, ahora, que ya terminó esa experiencia, que de ningún modo retomaría, creo que lo valioso de La Infancia es lo que muchos autores respondieron sobre poesía y procedimiento poético. Y creo que hubo respuestas mucho más interesantes que otras.
    El disvalor de los dos proyectos es, lo que me parece vos mismo estás remarcando en este post, la falta de ideología. Ese es el peligro o el riesgo de "la mezcla". Y esto lo veo ahora, a la distancia, digamos que contemplando "el producto". De hecho, en el hipotético caso de que se publicara un libro de la Infancia, como alguna vez pensé y como comenta Ana, yo creo que habría que volver a hacer una selección. Y, si se formara un grupo de gente para hacer otras actividades no podría hacerlo con todos los poetas que conocí, porque en la marcha del proyecto supe, entendí, las diferencias ideológicas que tenía con muchos de los autores que se acercaron o con quienes sostuve un diálogo. Saludos! Selva

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  2. Quizá no entendí el artículo de Ana Porrúa.

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  3. claro, yo tambien debo haber entendido mal, porque todo recorte es ideològico y tambièn recorta POrrua, no? pero bueno, yo estoy màs a favor de que se incluya antes de que se excluya. Serìa bueno sì, ser honesto y decir que no es inocente, nada es inocente,

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  4. Sr. Aulicino: que a Ud., con tantos a�os de poes�a a cuestas, le cueste esclarecerse acerca de la jerarqu�a que deber�a ejercerse en cualquier espacio de difusi�n de poes�a es algo un tanto preocupante. Es verdad que la palabra "jerarqu�a" no suena muy amigable y se impone como un orden estricto... pero quiz�s hace referencia a la presencia de alg�n criterio tendiente a valorar la poes�a por sus caracter�sticas est�ticas. En este sentido, eso de los "valores est�ticos" no me parece algo tan descabellado como nos lo quieren hacer creer en la actualidad. De hecho, sin esos criterios est�ticos carecer�amos de canon, de cr�tica y de otras pr�cticas que hoy en d�a nos permiten leer a grandes autores de otros tiempos y otras latitudes. De hecho, en este blog mismo Ud. no publica cualquier poema, lo que se agradece (a m� particularmente me resulta mucho m�s enriquecedor leer esto que, por ejemplo, las Afinidades electivas). Preg�ntese por qu� Ud. sube lo que sube y creo que ya se estar� esclareciendo un poco.
    Bueno, el tema da para mucho m�s, as� que corto ac� mismo.

    Una cosa m�s, creo que Porr�a no se pronuncia en contra de la desjerarquizaci�n y la mezcla, s�lo us� estos t�rminos dentro de una hip�tesis que expresa las supuestas ideas de esos autores citados. En realidad, yo tampoco entend� cu�l es la tesis de su art�culo, ser� que probablemente no la hay.

    saludos
    Carolina Contino

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  5. Gracias, Carolina, por este comentario.
    Lo que inentaba decir con esclarecerme acerca de las jerarquías es que no estoy a favor de ellas en principio. Entiendo que cuando publico lo que me gusta establezco una jerarquía; pero es bastante amplia, a mi juicio. Las Afinidades... reúne jerarquías distintas, el armado se establece a partir del afecto y la afinidad, que, cuando se trata de poesía o literatura o cine o teatro o colecciones de estampillas, pueden vincularse. En un gran porcentaje, creo yo, los autores que cada uno elige en ese blog están unidos a aquél por afectos literarios. Muy pocos deben de haber mencionado a su amigo del alma solo porque es su amigo; si tuvieran la capacidad de discernir entre amistad y buena poesía y no lo hacen, entonces estarían traicionando su propio gusto al señalar un autor malo que sin embargo es amigo... ¿No le resultaría un poco violento dejar de lado la mínima calidad para rendir tributo a la amistad? Si no son capaces de discenir, esto es también un dato. pero tomemos como válido que generalmente las afinidades entre poetas conllevan la estima o el afecto personal, aun cuando no se sea amigo íntimo del otro. No descarto que una minoría sólo haya puesto por delante la relación personal, afectiva, o el espíritu tribal, pero creo que el criterio de las Afinidades no es tan malo. Prefiero eso al canon establecido en la cátedra o cualquier otro lugar de autoridad. Me dice que mire mi blog: subo autores que poco tienen que ver conmigo con tal de que tengan un cierto grado mínimo de calidad. Los elijo a partir de libros nuevos, en general, o descubrimientos en la Red, pero siempre con el criterio de novedad. Ese juicio de calidad depende de mí; en las Afinidades, depende de muchos, y la cuestión es precisamente ver cómo constituyen su "canon" o sistema una gran cantidad de poetas en actividad.El grado de amplitud e incluso de desconocimiento que tienen. En cuanto al artículo de Porrúa, no creo equivocarme. No ha puesto las palabras desjerarquización y mezcla de manera tal que se puedan entener como valores; ni siquiera como términos neutros. En este caso, lo hubiera explicado, supongo yo. Es lo mínimo que se espera de palabras cargadas o bastante matizadas por un significado negativo.

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  6. Noto en el artículo de Porrúa una plancha de etiquetas abrumadora. Se etiqueta lo que estuvo, lo que no estuvo, lo que está y no está, dónde está, con quién, cómo, etc. Me río (y me parafraseo) por puro contraste: ¿es que la academia sigue enseñando sólo eso, Ana? ¿Y quién es uno/a para afirmar que alguien " (...)junto a otros (...), posiblemente, desaparezcan en unos años del campo de la literatura"? Y quizá ahora contradiga lo anterior: ¿Acaso no hay en la misma lista –numerosa si las hay, Alejandro, creo que los límites son buenos–, de Anadón gente, tipógrafos y perritos de ceniza que cayeron por efecto de la simple gravedad? Digo: el análisis de Porrúa me parece pobre en sustancia, rico en investigación y el tomado de nota; la jerarquía o mezcla de las que Aulicino habla ni siquiera están fundamentadas como correspondería en dicho artículo. Ana, ¿por qué no lo publicaste aquí mismo? o ¿por qué no pedís el retiro voluntario, ya que "no te va"? En nombre de esos nobles ausentes, los que ni siquiera saben qué catzo es un blog, qué corno será neoobjetivismo en Vignoli, en nombre de los consciente e inconscientemente tapados, ninguneados o simplemente olvidados y los desconocidos, sean de Capital o de las provincias, propongo que al que no le guste lo que hay, cambie de ¿canal, blog, página, cómo se dice?, Irene Gruss

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  7. El propio gestor del proyecto Las afinidades dice: “Si venía “A” y me decía que había elegido a “B” (la hija del panadero), yo iba y subía el material de la hija del panadero; más allá que yo pensara que la hija del panadero estuviera más para el lemon pie que para el verso libre” (ver discusión en la página de las Afinidades). Y Ud., Aulicino, asegura que “(...) el criterio de las Afinidades no es tan malo. Prefiero eso al canon establecido en la cátedra o cualquier otro lugar de autoridad”. Está bien, gustos son gustos, pero eso yo no lo creo; no creo que de verdad Ud. prefiera una cosa a la otra, y de nuevo lo reenvío a su blog, en el que ejerce un rol jerarquizador (del cual no veo por qué disculparse). Otra cosa de la que hay que hablar es de la tan citada “academia”... referirse a ella en los términos en que se escucha es del siglo pasado. ¿Dónde están los terribles dinosaurios? Yo lo único que veo es a un montón de personas hablando en contra de los lugares de poder cuando son ellos mismos los que lo ejercen hoy en día. ¿Entonces, cómo se entiende?
    Hay muchas cosas en relación al campo poético actual con las que no acuerdo, pero las acepto como signo epocal; lo que me cuesta más aceptar es que me vendan gato por liebre en el discurso sobre lo que está sucediendo.
    Con respecto a la respuesta de la Sra. Gruss, guau... qué opinión en tono más adolescente, qué la Suerte le conserve el ímpetu juvenil.

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  8. Fíjese, Carolina, que debo decir otra vez que no estoy contra la jerarquización y a favor de la anarquía, por otra parte impracticable, porque si se tratara de dar cuenta de todo lo que se publica como poesía, el blog no daría abasto (el espacio alcanzaría, porque debemos suponer que el de un blog es infinito, pero no el tiempo del bloguero). Cuando escribí la frase que cita usted, estaba señalando extremos, me gusta el invierno si me dan a elegir entre invierno y verano. Pero están el otoño y la primavera, y esas temperaturas, luz nueva y crepúsculo, son lo mejor para cualquier blog de poesía y para las ideas en general...
    Lo que cita usted de Méndez está, admitamos, un poco retaceado. Méndez defiende su proyecto como un campo en el que las jerarquías las establece cada autor convocado, y cada lector, según siga los links de un autor o de otro, o vuelva a atrás, o elija unas veces a quienes conoce y otras a quienes no conoce. No se puede leer ese blog como un compacto, como una antología. Son muchas. La índole del proyecto es esa, y no exagero, así surge de la lectura a través del hipertexto.
    No me disculpo por la jerarquización que establezco aquí. Sólo digo que es más bien heterodoxa. La hago sobre lo que me gusta, a la vez tratando de no apartarme de un criterio de actualidad. Le doy un ejemplo: si publico a Montale, que me parece central en la poesía del siglo pasado, lo hago porque encuentro que han subido videos con Montale a Youtube, o porque tengo en mis manos la Poesía Completa de Montale traducida por Fabio Morabito y publicada por Galaxia Gutenberg en 2006. Algunas veces publiqué poetas que me gustan, a propósito de nada... es decir, sin motivo de actualidad que lo justifique, y sin embargo, si vamos a darle una vuelta a eso, la ausencia de algunas reediciones es también un dato de actualidad. Que usted pueda ver en todo esto una jerarquización, lo entiendo, pero no es un tipo de jerarquización estricta, el canon aquí se hace de santos mayores, santos menores, beatos, creyentes y hasta sabandijas, según como se mire. En este blog hay una antología de poesía argentina que hicieron los lectores del blog (no son miles, pero son algunos, y distintos), y yo mismo, eligiendo los autores según un criterio que resultó tanto o menos arbitrario que cualquier otro: los que en ese momento recordaban, es decir, los autores que siempre, o a menudo, recordaban, desde Vicente López y Planes en adelante. Si recorre usted esa selección, verá que no es disparatada, o mejor dicho, que no lo es respecto a cualquier otra que se haya hecho (no se han hecho muchas últimamente, recuerdo dos: una de Martini Real y otra de Raúl Gustavo Aguirre, de los setenta). De modo que un sistema abierto, colectivo o individual, me parece sí mejor que los "sistemas de lectura" que arma la cátedra, no por los nombres que pone en circulación, sino por el peso de autoridad que imprime sobre ellos. La cátedra o academia no está integrada por dinosaurios, no; más bien, por quienes pretenden que son lo contrario. Pero que sean otros quienes manejan los sellos no significa que el poder de esos sellos haya caducado. Entonces sí, soy partidario del tipo de desjerarquización que implica Las afinidades... No quiero que me digan cuáles son los gatos y cuáles las liebres. Además, me gustan gatos y liebres, todo lo que salte o corra fuera de los "sistemas de lectura". Me parece que en ese sentido no me disculpo.
    Gracias, y un saludo cordial.

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  9. yo le quiero aclarar a irene gruss, como ya hice con osvaldo aguirre que no soy ni resentida del interios (pese a que vivo en uno delos lugares más hermosos del mundo y que de casualidad es interior) ni tampoco me siento ninguneada, ni nada de eso, sólo que me parece interesante discutir algunas cosas, sobre todo cuando se arman pseudo canon (s) raros, o sospechosos, eso. claudia sastre
    pd: no tengo idea de por qué irene gruss piensa eso... será prejuicio?

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  10. Claudia, en ningún momento dije eso, Irene

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  11. Bueno, mejor asì, porque con esas cuestiones hay todo un tema, y en realidad no tengo idea de por què es asì. Desde el interior nos formamos (como podemos, es argentina tambien) leemos y tratamos de estar actualizados, pero da la sensaciòn (y no hay resentimiento en este comentario) de que no se toma en cuenta ese detalle a la hora de ver, incluso estèticamente, la particularidad de un escritor. Acà en el sur tenemos el debate aùn caliente con el tema de regionalismo, sobre todo con los dinosaurios de la sade que creen que hay que escribir sobre el guanaco, y quizàs a los poetas del norte les parezca una pavada, pero existe, y nos jode profundamente a los que intentamos otra cosa, entonces meparece que està bueno que se lo vea desde la crìtica tambien. Yo lo intento, pero ademàs de que me odien o me miren con desconfianza porque ademas de escribir literatura escribo crìtica, no consigo que la discusiòn se abra. Asì como yo, hay mucha gente valiosa que lo intenta y tiene poestura tomada, eso lo deberìa saber el centro del canon, que enseguida nos dice resentidos. Escritores y criticos valiosos, como Marcelo Eckhardt, Ariel Williams, Cristian Aliaga, por dar algùn que otro nombre.
    Claudia sastre

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