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Como una ilusión, así como hablo y siempre que se habla.
Esta tentativa se disipa,
asciende con pasos lentos
haciendo nacer un conjuro semejante a ese hilo temido
sobre algunas omisiones y la transición.
La idea se desvanece detrás del vidrio del ojo,
atravesando reflejos recíprocos,
extendiéndose sobre la corteza aérea del placer
hasta la visión del deseo.
A mí
y a todo lo que uno
fuera de sus garras, de su hambrienta torre,
donde el polvo viene de la noche
a posarse sobre la piel,
ella arranca estas escamas
situadas en un cuerpo que no distinguiría,
estas escamas de mi aspecto actual,
cuando nado y me deslizo entre paredes de nieve.
Exposiciones
8
III
Mares infinitos.
En los bordes, el pensamiento levanta su espiral de hielo.
La araña acecha bajo la lámpara andrógina
Hay un silencio de mármol en la extensión de las cenizas.
Monólogos que fluyen.
Frases tomadas, redes vegetales
que absorben toda forma flotante.
Hebras —palabras en los orígenes del placer
apartando obstinadamente vidrios, reptiles,
cubriendo las esferas nocturnas.
Hombres gusanos viven al abrigo de la ausencia,
a sus propios ojos desaparecen.
Composición (1984)
Urbs dixit
Esperaba una llamada cuando
en pleno Buenos Aires fueron liberados
y desapareció todo vestigio
—proverbial astucia.
Brotaron los temores
(a veces conviene callarse).
A la misma hora y a metros del lugar,
recolección de basura,
máquinas tragamonedas
y en esos paseos, tolderías y colchones,
juegos, bancos, cestos, bebederos,
vecinos que venden sus propias pertenencias
y sueñan con volver al empleo
—una emoción social,
una emoción ligada al propio yo.
La noche avanza en el bar:
dos voces para respirar otro aire.
El país de donde había salido
ya no existía
—existe sólo en el pasado
(está en la mira, aguarda).
A la misma hora y a metros del lugar,
sobre el caracol del paso a nivel, rezaron,
y un tren aminoró su marcha.
Soportar demoras o no poder viajar,
o hacer una huelga, cortar un puente.
Una fuerza fuera de control:
con guantes y uniformes desfilaron
en la calle peatonal
paralela al muro de ladrillos.
Brotaban los temores
—la violencia es hija de la violencia.
Paseante y Huésped (2016)
Liliana Ponce (Buenos Aires 1950) " La intención y el azar" Op. Cit., entrevista y selección de poemas de Silvana Franzetti, marzo 23, 2025
Más poemas de Liliana Ponce en Otra Iglesia Es Imposible - Op. Cit. - Blog del Amasijo -Eterna Cadencia - El Infinito Viajar - La Infancia del Procedimiento
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Foto La Nación