Esa soy yo:
una mujer gastada y melancólica
con la mirada
que arranca de una infancia razonable
y una cabeza peinada
como corresponde
a una señora de tantos años.
Procuro que las canas
tengan su orden natural
que tranquiliza a los que miran,
aunque yo casi estoy segura,
después de todo,
que moriré sin haber sentado cabeza.
Emma Barrandeguy (Gualeguay, Argentina, 1914-2006), Refracciones, Sociedad de Escritores de Gualeguay, 1986
Ref.:
Emma, la cautiva, por María Moreno / Radar Libros
Emma Gunst
Amamos a Emma!
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