Dicen que un pájaro
vuela porque es lo único
que sabe hacer
y hoy quisiera ser como él
volar hasta la copa del árbol
para observar desde lo alto
la belleza
que hemos perdido.
En la tarde
Vi una flor llorar, qué cosa rara
pensé mientras el colibrí con su aleteo
intentaba animarla.
De pronto el cielo se abrió
y unas gotas comenzaron a caer
suaves sobre mí.
En lo simple me detengo y me levanto
para ver los colores del arcoíris
belleza pura en la tarde de domingo.
El jardín de mi madre
Lo más cercano a jardín que tuve
fue un malvón de flores rojas
hasta que el viento en el balcón
desparramó los pétalos,
la lavanda se mantuvo un tiempo
hasta que el sol secó sus ramas.
Si de jardín se trata pienso en Caseros.
Allí todo es verde y florido: la santa
rita con sus flores de color fucsia,
la oreja de elefante,
el perfume del jazmín chino
y mi madre que pregunta
si están más altos los pinos.
María Laura Decésare (Rufino, Argentina, 1969)
Ediciones del Dock,
Buenos Aires, 2023
Otra Iglesia Es Imposible - Ediciones del Dock - La Parada Poética - La Poesía Alcanza - Letralia - Círculo de Poesía - Al Pial de la Palabra - Poetas Argentinos
Cuanta belleza para un día de mi tristeza. Gracias.
ResponderBorrarPrecioso libro
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