Sentimiento del mundo
Tengo tan sólo dos manos
y el sentimiento del mundo.
Pero estoy lleno de esclavos:
mis recuerdos que escapan
y lo que el cuerpo concilia
en la confluencia del amor.
Cuando me levante, el cielo
estará muerto y saqueado,
yo mismo estaré muerto,
muerto mi deseo, muerto
el pantano.
Los camaradas no me dijeron
que había guerra
y era necesario
traer fuego y alimento.
Humildemente les pido me perdonen:
me siento disperso.
Anterior a las fronteras.
Cuando los cuerpos pasen,
yo quedaré solito
deshilachando el recuerdo
del campanillero, de la viuda, del microcopista
que habitaban la barraca
y no fueron encontrados
al alba:
alba más oscura que la noche.
Con las manos enlazadas
No seré el poeta de un mundo caduco.
Tampoco cantaré el mundo futuro.
Estoy preso a la vida y observo a mis compañeros:
están taciturnos mas nutren grandes esperanzas.
Junto a ellos considero la enorme realidad.
El presente es tan grande, no nos apartemos.
No nos apartemos mucho, vayamos con las manos
enlazadas.
No seré el cantor de una mujer, de una historia;
no hablaré de suspiros al anochecer, el paisaje visto
desde la ventana,
no distribuiré enervantes o cartas de suicida.
No huiré a las islas ni seré raptado por serafines.
El tiempo es mi materia, el tiempo presente, los
hombres presentes,
la vida presente.
[Sentimento do mundo, 1940]
Carlos Drummond de Andrade (Itabira, Brasil, 1902-Río de Janeiro, Brasil, 1987), Material de Lectura nº 45, Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), 2009
Traducción de Maricela Terán
Otra Iglesia Es Imposible - Escritores - El Placard - A Media Voz - Letralia - Las Nueve Musas - Letras Libres - Círculo de Poesía - Audio Átivo - La Maja Desnuda
---
Foto: Roteiros
No hay comentarios.:
Publicar un comentario