Tercera parte
La distribución de la soledad
mediante el orden de las palabras
instrumenta una narración
de la estructura interna del paisaje: falso.
Quizás en su sustancia, su enlace químico,
y su respectivo número atómico
que el padre de la combinatoria
expusiese cual error factorial después
de declarar: es incluso menos incorpóreo
que el miembro fantasma del amor
en el que la perspectiva
siempre es lejana. Un objeto de humo
y sal rodeado de insectos de plástico,
ojales, dientitos, casas pintadas,
asteroides y trompetas que dan origen
a los números irracionales para recordar
“que los demonios
no han sido creados por demonios.”
Considerando que
“dormirán allí las bestias fieras
y sus casas se llenarán de hurones:
allí habitarán hijas del búho, y allí
saltarán peludos. Y en sus palacios
gritarán gatos cervales, y chacales
en sus casas de deleite…”
*
Atrás un tren que pasa y veo
de memoria, adelante la autopista elevada
y sus autos en la misma línea.
Ninguno de estos objetos se continúa
en el Kazakstán de la prolongación del sueño.
Un pequeño halcón que se resiste
a identificarse chingolo picotea
un disco plateado. Todo se cubrirá de libélulas
sin poder emular el hecho primigenio:
la súbita y titilante oscuridad,
el muro de ligustrinas imantadas
de cilindros alados, intermitentes
en su espacial permanencia, separados
del sueño continuo de una realidad
más óptima y elastibilizada.
La atención en la espera, en el daño
de la velocidad. La venganza anticipada
de la destreza como una cabina
que se desprende de la nave mayor
dando esperanza solo a la necesidad.
Los árboles al costado de la cancha,
la niebla y las preguntas que la constituyen:
¿Por qué los enanos la polka
han de bailar? ¿Por qué la fiesta de la sardina
convoca a moros y cristianos?
Darío Rojo (Castex, Argentina, 1964)
La sexta armonía,
Ediciones del Dock,
Buenos Aires, 2018
Foto: La vida que te agenciaste, Mario Varela
Ref.:
Centro Cutural de España
Op. Cit.
A través de la vanguardia hispanoamericana
Breve historia de la literatura argentina
Poetas Argentinos
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