derivado de Verlaine
para John Griffith
Aquella calurosa noche de Septiembre, dormimos en una cama
pequeña, desnudas, y en nuestros frágiles cuerpos el sudor
se enfrió y se renovó. Extendí los brazos
y tú, las manos en mis pechos, me besaste. Noche de ámbar.
Nuestros camisones estaban en el piso donde te arrodillaste
y te volviste feroz, apretaste tu cabeza contra mi vientre
y tu boca contra el oro rojo, las sombras rosas. Salvo
que no lo vi así en ese instante sino que arqueé
la espalda y exprimí agua del aire denso
con los puños. Recuerdo también que escuché, clara
pero distante, una sirena unas calles más allá -di
da di da di da- que se mezcló con mis propios
gritos absurdos, así que alcé la vista, aun entonces,
para ver mis dedos contándose solos, bailando.
de The Other Country
Carol Ann Duffy (Glasgow, 1955), Carlos López Beltrán y Pedro Serrano, La generación del cordero. Antología de la poesía actual de las islas británicas, Trilce Ediciones, Ciudad de México, 2000
Girlfriends
derived from Verlaine
for John Griffith
That hot September night, we slept in a single bed,
naked, and on our frail bodies the sweat
cooled and renewed itself. I reached out my arms
and you, hands in my breasts, kissed me. Evening of amber.
Our nightgowns lay on the floor where you fell to your knees
and became ferocious, pressed your head to my stomach,
your mouth on the red gold, the pink shadows; except
I did not see it like this time, but arched
my back and squeezed water from the sultry air
with my fists. Also I remember hearing, clearly
but distantly, a siren some streets away -de
da de da de da- wich mingled with my own
absurd cries, so that I looked up, even then,
to see my fingers counting themselves, dancing.
Ilustración: Dos mujeres desnudas en una playa, c. 1950, Sanyu (Chang Yu)
Ohhh quiero ese libro!!!
ResponderBorrarhermoso Jorge!
El libro La generación del cordero no creo que se consiga ya, el de Duffy, debe conseguirse... en Londres. Gracias por tu comentario, EmmaGunst
BorrarGracias, querido Jorge. Alguien me acaba de decir que está en la Gandhi de Guadalajara por poco más de 100 pesos (unos 8 dólares). Si se lo encargan a alguien antes de que yo lo haga mañana, me lo ganan.
ResponderBorrarPedro